Microorganismos beneficiosos

¿Qué son los microorganismos beneficiosos?

Los microorganismos beneficiosos, también conocidos como microbios beneficiosos, son microorganismos que proporcionan efectos positivos a su entorno, incluidos diversos sistemas y organismos biológicos. Estos microorganismos desempeñan un papel crucial en el control biológico de plagas al infectar y controlar eficazmente las plagas dañinas.

Los microorganismos beneficiosos para el control de plagas incluyen hongos, bacterias y virus que se encuentran de forma natural en entornos como el suelo, el agua y el aire. Estos microorganismos se aprovechan para el control de plagas mediante aplicaciones como los biopesticidas, en los que se introducen para atacar plagas, proporcionando una alternativa ecológica a los pesticidas químicos.

Ejemplos conocidos de microbios beneficiosos son los hongos Lecanicillium muscarium, Beauveria bassiana, Metarhizium anisopliae e Isaria fumosoroseus y la bacteria Bacillus thuringiensis.

Microorganismos beneficiosos para el control de plagas

Cómo funciona

  1. Infección y colonización: Los microorganismos beneficiosos empiezan por infectar a sus insectos huéspedes. Los hongos producen esporas que se adhieren a la cutícula (cubierta externa) del insecto. Una vez adheridas, las esporas germinan, penetran en la cutícula y colonizan el cuerpo del insecto.
  2. Daños internos: Una vez dentro del insecto, el hongo prolifera, causando daños internos. Esto puede provocar la muerte del insecto.
  3. Producción de esporas: A medida que el insecto sucumbe a la infección fúngica, el hongo sigue creciendo. Finalmente, produce más esporas, que pueden liberarse al medio ambiente para infectar a otras plagas.

Ventajas de los microorganismos en la agricultura

Sin residuos nocivos

A diferencia de los pesticidas químicos, los microorganismos beneficiosos suponen un riesgo mínimo para el medio ambiente. Se descomponen de forma natural, sin dejar residuos nocivos.

Control preciso de las plagas

Los microorganismos beneficiosos son específicos para las plagas que atacan, como pulgones, mosca blanca y trips, lo que reduce al mínimo los daños a los insectos beneficiosos y a otros organismos no objetivo.

Reducción de la dependencia de los plaguicidas

La incorporación de microorganismos beneficiosos a las estrategias de control de plagas reduce la necesidad de plaguicidas químicos, contribuyendo a una agricultura más sostenible y ecológica.

Productos de microorganismos beneficiosos

Koppert ofrece una gama de productos de microorganismos beneficiosos que se han convertido en fundamentales en la gestión de plagas para la agricultura sostenible. Aprovechando las defensas propias de la naturaleza, Koppert utiliza el poder de los hongos entomopatógenos, como Lecanicillium muscarium (Mycotal), Beauveria bassiana (Boveril), Metarhizium anisopliae (Metarril) e Isaria fumosoroseus (Isarid), para proporcionar soluciones eficaces para el control de plagas. Estos productos de microorganismos beneficiosos, cuidadosamente desarrollados y respaldados por años de investigación, están diseñados para atacar plagas específicas, proporcionando un control de plagas de precisión y eficacia. La disponibilidad de estos productos depende de la normativa específica de cada país.

Los microorganismos beneficiosos pueden aplicarse mediante diversos métodos de pulverización. El método de aplicación específico depende de las plagas objetivo y del tipo de cultivo.

Preguntas frecuentes